sábado, 19 de octubre de 2013

Roscos de vino

Una tarde de lo más feliz haciendo roscos con mi nieto Hugo, con 4 añitos y apunta maneras.


Ingredientes:
250 g. de harina de fuerza
250 g. de harina repostería o harina floja
125 ml. de vino dulce de Málaga
110 ml. de aceite de oliva
100 g. de manteca de cerdo
80 ml. de anís o aguardiente dulce
Ralladura y zumo de 1/2 limón

125 g. de azúcar
1 cda. de ajonjolí (también llamado anís o matalauva)
2 cdtas. rasas de levadura
Un puñado (lo que te entre en la mano cerrada con las almendras) de almendras crudas sin piel, (yo tenía cubitos de almendras crudas y es lo que puse)
1/2 cdta. de canela molida
Azúcar glas para rebozar

Elaboración:
Precalentamos el horno durante 10 minutos a 150º-160º.
Tostamos la harina de repostería en el horno hasta que tome un poquito de color, removemos de vez en cuando con cuchara de madera.

Doramos las almendras en una sartén con el aceite caliente.
Colamos y las machacamos en el mortero.


Volvemos a poner el aceite en la sartén, cuando el aceite esté caliente echamos el ajonjolí y apagamos el fuego rápidamente, añadimos enseguida la manteca de cerdo, que con el calor residual se derretirá. Dejamos enfriar.

Rallamos el limón y lo exprimimos, reservamos.

Una vez que la harina se haya enfriado la tamizamos en un bol junto a la harina de fuerza, canela molida y levadura.

Le añadimos la ralladura del 1/2 limón y almendras majadas o machacadas (aquí en Málaga, es majada cuando está machacada en el mortero).
Removemos con cuchara de madera.

En otro bol un poco más grande echamos el aceite con el ajonjolí y la manteca de cerdo, que debe estar frío. Añadimos el zumo del 1/2 limón, anís, vino de Málaga y azúcar.
Batimos con varillas.

Vamos añadiendo a poquitos la mezcla de harina, sin parar de batir hasta que ya no podamos con las varillas, momento en el que utilizamos una cuchara de madera y a continuación las manos, hasta ligar toda la harina en la masa y no se nos pegue en las manos.


Hacemos una bola y dejamos reposar tapando la masa con un paño mínimo 1/2 hora.
Esparcimos un poco de harina en la mesa de trabajo y estiramos con rodillo la masa dejándola de 1 cm. de grosor más o menos y formamos los roscos con lo que tengamos a mano. Yo tuve una ayuda maravillosa (mi nieto Hugo, se lo pasó en grande y además hizo unas bolitas para él solo).
Aquí se ve su manita y codo lleno de harina.


Preparamos la bandeja del horno con papel de hornear y colocamos nuestros roscos.
Horneamos con el horno precalentado a 160º unos 18 minutos más o menos, cuando los veamos que han tomado color los sacamos y pasamos por azúcar glas, dejándolos enfriar antes de liarlos en papel de seda.




Los pequeñitos son las bolitas de mi nieto.
Espero que os gusten.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Por favor deja tu comentario, me gustaría saber tu opinión sobre ésta receta. Muchas gracias por dedicar tu tiempo en ver mis entradas.