Calabacines y berenjenas rellenas de albóndigas de pollo

Ingredientes:
2 calabacines más bien pequeños
2 berenjenas más bien pequeñas
16 albóndigas de pollo -podeis ver la preparación Aquí-
Chorrito de aceite de oliva virgen extra
1 sobre de queso gouda y cheddar bajo en grasas rallado
Un pelín de ras el hanout o especias de pinchitos
Elaboración:

Limpiamos bien bajo el chorro del grifo las berenjenas y calabacines, secamos con papel de cocina y cortamos por la mitad a lo largo. Les hacemos unos cortes sesgados tal como se ve en la foto, salamos y echamos un chorrito de aceite por encima.

Horneamos con el horno precalentado unos 35-40 minutos, hasta que al pincharlos no ofrezcan resistencia.

Mientras asamos las verduras, preparamos las albóndigas y freímos en abundante aceite de oliva, a fuego medio hasta que esten doradas.

Las ponemos en la picadora y picamos.

 Vaciamos los calabacines y berenjenas con cuidado de no llevarnos la piel y picamos con cuchillo la carne de ambos, pero en platos separados.

Cojemos la mitad de las albóndigas trituradas y las añadimos a la carne de los calabacines, removemos.

Yo había preparado tomate frito casero, así que en la misma cacerola donde lo hice, dejé un buen cucharón y añadí la carne con el calabacín, un buen puñado de quesos rallados, pelín de especias ras el hanat o si no teneis le podeis añadir especias de pinchitos, probamos de sal y si fuera necesario le añadimos un poquito más. Removemos bien.

Colocamos los calabacines en la fuente donde los vayamos a asar -en mi caso fueron de aluminio, para luego taparlos bien y congelar, así cuando me vaya haciendo falta los voy descongelando y calentando en el micro-

Los rellenamos con ayuda de una cuchara y les ponemos por encima bastante queso rallado.

Con las berenjenas hacemos el mismo proceso.

Gratinamos hasta que veamos que el queso se ha fundido y ha tomado un bonito color dorado.

Espero que os guste tanto como a nosotros.